Màster en Bioètica i Dret UB, VII edició 2004-2006.
La capacidad para experimentar sufrimiento
es determinante en la delimitación de la esfera moral. No estamos ante un criterio arbitrario porque la moral surge de nuestra preocupación por determinados daños que nos parecen injustos. El interés básico de evitar el sufrimiento siempre ha sido objeto de preocupación de la ética. Generalmente
todas las teorías protegen la promoción de
este tipo de interés individual de una u otra forma. No hay que entenderlo como una propiedad biológica más porque estamos ante una característica previa que sí está definitivamente ligada al ámbito de lo moral.